¡Muy buenas, chicos! ¿Cómo va todo?
Tengo que confesaros algo: esta va a ser la primera entrada que escriba fuera de mi España natal...pero ya os contaré eso más adelante!
Con el comienzo del curso, algunas de nuestras series favoritas regresan a la pequeña pantalla, mientras que, otras, han preferido acompañarnos durante todo el verano y ahora les ha llegado el momento de decir adiós, como es el caso de mi querida
Mr Robot, que, si su primera temporada fue buena, con la segunda se ha coronado como una de las mejores series en la historia de la televisión y, el que diga que no, miente. Y gran parte del mérito se lo debemos al chico que esta sobre estas líneas: Rami Malek, ganador del Emmy al mejor actor principal en serie dramática (abro paréntesis para decir que el de mejor actriz en la misma categoría fue para Tatiana Manslany por su papel, o bueno, papeles, en
Orphan Black, que ya iba siendo hora) y que se ha convertido en uno de los actores revelación del momento y que, como diría la mítica canción de
Fama: He's gonna live forever. Baby, remember his name. Si alguno acaba de terminar su retiro espiritual en la montaña y no tiene ni idea de quién es este muchacho, ¡que siga leyendo!
